Frutos Regionales

En este sector de la Patagonia Chilena es posible encontrar variados frutos silvestres durante el verano especialmente. Con la mayoría de ellos se elaboran mermeladas, licores u otros productos regionales.

Es parte de nuestro objetivo para contribuir al Turismo Sustentable compartir con ustedes diferentes informaciones que facilitan el desarrollo de las economías regionales.

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El Calafate: Arbusto espinoso propio de la Patagonia (Berberis). Crece generalmente en matorrales. En primavera se cubre de pequeñas flores amarillas muy perfumadas que luego se convierten en pequeñas frutas madurando en febrero. Con este fruto se hace mermelada, jugo, licor y variedad de productos cosméticos.

Probable Etimología del nombre: Se denomina «Calafate» a la persona que tiene por oficio rellenar y taponar las uniones de las maderas de los tablados de las embarcaciones, con estopa y brea. A esta tarea se la llama «calafatear». Durante el invierno de 1520, las naves de la Expedición de Magallanes, ancladas en lo que hoy es la Bahía de San Julián (pcia. de Santa Cruz) fueron sometidos a un calafatero y necesitando de alguna fibra vegetal que suplantase a la estopa, utilizaron las de una «mata espinosa que abunda en la región», tomando esta el nombre de «CALAFATE» (MARIO ECHEVERRIA BALETA)

La Leyenda del Calafate

Los bosques de Ñires, Lengas y Cohigues, comienzan a tomar un tono característico anunciando el otoño y dando a los árboles una gama multicolor que va desde el amarillo pálido hasta el rojo intenso pasando por todos los matices imaginables del dorado y el naranja. Esta transformación se viene repitiendo año tras año desde épocas inmemoriales. Los Tehuelches o Tsonekas, verdaderos dueños de la tierra, conocían los secretos del sur patagónico en su permanente deambular de Aike en Aike. Los guanacos, alimento y abrigo de esta gente, comenzaban a descender de las mesetas en tropillas hacia los valles encerrados en grandes cañadones en busca de abrigo y alimento. Hacia el oeste, la espina dorsal de América que son los Andes, ha amanecido cubierta de nieve. El invierno llegará inexorablemente y ellos lo saben. En esa época, las tribus Tehuelches comenzaban su viaje hacia el norte, donde el frío no es tan intenso, ademas la caza no faltaba, pero tengamos en cuenta que el viaje se hacía a pié, ya que los primeros caballos arribaron a Santa Cruz allá por el año 1526, con la expedición de Jofré de Loaiza. Koonex, la anciana curandera de la tribu, ya no podía caminar más, sus viejas y cansadas piernas no etaban agotadas, pero la marcha del grupo no se podía detener y es Ley natural cumplir con el destino. Ella lo comprendió. las mujeres de la tribu le hicieron un KAU con pieles de guanaco y juntaron abundante leña, prepararon Charkikan, reunieron huevos conservados en sacos con grasa y se despidieron de ella con el GAYAU de la familiar, luego ella entonó con un hilito de voz, el milenario canto de la raza y envuelta en su KAI AJNUN, fijó sus cansados ojos en la distancia, hasta que la gente de su tribu se perdió tras el filo de una meseta. Se quedaba sola para morir, ya que los alimentos no le alcanzarían para pasar el largo invierno, aunque tal vez algún puma hambriento le acortara la espera «- Mejor si me encuentra dormida, total es un ratito», pensó. Pasaron soles y lunas, hasta que la vida volviera en todas sus expresiones. De pronto se escuchó la voz de la anciana curandera que desde el interior del KAU, reclamaba por la soledad del invierno, las aves que revoloteaban le contestaron -«Nos fuimos porque en otoño comienza a escasear el alimento y durante el invierno no tenemos donde abrigarnos». Entonces la anciana proclamó «Desde ahora en adelante tendrán alimento en otoño y buen abrigo en invierno, ya nunca más me quedaré sola» Cuando una brisa volteó los cueros del toldo, en lugar de la anciana, se hallaba un hermoso arbusto espinoso de perfumadas flores amarillas. Al promediar el verano las flores se hicieron frutos y antes del otoño comenzaron a madurar tomando un color azul-morado de sabor exquisito y gran valor alimenticio. «Desde entonces el que come Calafate vuelve»

Vocabulario relacionado:

AIKE: Paradero, lugar, vivir, morar
KOONE: Anciana
KOON: Fruto del calafate
KOONEK: Calafate en flor
KAU: Toldo, vivienda
CHARKIKAN: Charque ahumado y salado
GAYAU: Canto identificatorio de cada familia
KAIAJNUN: Capa o quillango pintado
KAIKENES: Avutardas
KIKEN: Chingolito
CHALTEN: Montaña sagrada de los Tehuelches, rebautizada como Fitz Roy
ARISKAIKEN: Epoca de los guanaquitos nuevos o primavera